La luna nueva en Piscis es un reinicio espiritual y una renovación de nuestra Fe, y es una excelente oportunidad para llorar todo el dolor que tenemos guardados en el fondo de nuestra alma, liberar la falsa sensación de control y conectar intuitivamente con el universo.
Muchos de notros estamos despertando o hemos despertado de un largo letargo y nos estamos abriendo a lo mágico, lo sutil, lo etéreo, lo inexplicable. Si no crees en lo superior o no te sientes religioso, no te frustres, porque esta es quizás la oportunidad para emprender este camino. Pero para eso, tienes que estar abierto a recibir las señales.
Cuando hablamos de Piscis, estamos hablando de nuestra conexión con Dios. No entendido en el Dios que profesa una religión en particular, sino más bien, en el sentido de conexión con algo superior. Piscis no niega a ningún Dios particular, más bien acepta sin juzgar a todas las posibilidades, porque reconoce que en todos ellos hay una parte de la verdad, y que todos somos Dios.
A veces vivir en este plano terrenal nos anestesia y nos hace olvidar de que existe una explicación mucho más asombrosa de todo lo que esto es. Esto a lo que le llamamos Vida, y que también a veces se siente como una prisión, sobre todo cuando tenés mucho Piscis en tu carta natal. La tierra también comprime, y tiene energía oscura que corrompe. Es la materia, el cuerpo, la realidad. Vivimos tapando nuestra vida con cosas, pero quizás incluso teniendo mucho, pudiéramos sentirnos vacíos.
Cuando venimos a la tierra, una parte de esa fuente creadora (llamado Espíritu o Dios) se fragmenta de sí para encerrarse en un cuerpo. Es nuestra alma (la Luna), que cohabita con nosotros durante este recorrido en la tierra. A veces está feliz y rebosante, y nos hace vivir los mejores momentos; pero el camino también es cansado, y queremos largarnos a llorar por la nostalgia que nos produce estar tan lejos de casa. Estas son las aflicciones emocionales, que vienen de “Dios sabe dónde”.
Así sentimos, y hay que aprender a convivir con los estados de vulnerabilidad que produce. La angustia, la preocupación, el nerviosismo, y todo el rango expresivo de emociones, vienen de nuestro mecanismo lunar.
Piscis, como signo mutable, tiene que ver con un ámbito de la vida del cual participamos, y este es el espiritual. Es esta la Casa 12, una casa que les mentiría si les digo que la he entendido por completo.
Esta casa se manifiesta de maneras sorprendentes, sutiles e inexplicables, y son principalmente las señales que recibimos del Universo, las que nos guían a desencriptar el mensaje.
Son los cierres de ciclos, cuando vuelve el pasado para terminar algo pendiente, y los grandes despertares de consciencia de todo el trasfondo de las cosas. Los procesos piscianos o de casa 12 conllevan el sentimiento de darse cuenta de las cosas. No por nada la casa 12 también es una casa cadente, de toma de consciencia. Pero para escuchar el mensaje, tenemos que estar abiertos y receptivos, y sobre todo, habitar el silencio.
Porque es los momentos de mayor silencio donde se manifiesta lo inexplicable, y quizás entonces empecemos a contemplar con mayor apertura. Esta lunación nos lleva a despertar esa conexión.
También son procesos que están conectados con lo emocional y especialmente con el dolor. Llorar es una tarea muy pisciana y es la manera en la que limpiamos no sólo nuestra alma, sino también nuestro canal. Porque todos somos canales, y sino pregúntenles a los piscianos. Piscis nos hace volvernos más sensible a nuestro mundo interno y las cosas nos llegan, porque estamos en íntima conexión con ellas.
Si querés cómo te pega esta lunación, aquí van unos pequeños horóscopos. Te invito a que también uses tu Sol o Ascendente Dracónicos:
Para Aries de Sol o Ascendente: este proceso tiene que ver con despertar estos sentimientos de conexión y de reconocer al Todo en nosotros, y a nosotros mismos en esa totalidad. La mejor manera de emprender este camino es dejándote llevar y soltar la sensación de control. Sé que fluir no es algo que te guste hacer, pero si quieres poder entender las señales, tienes que soltar el Ego.
Para Tauro de Sol o Ascendente: esto marca un período de apertura a lo sublime. Permítete conectar con nuevos grupos y ábrete a las posibilidades, que se pueden dar cosas realmente muy copadas.
Para Géminis de Sol o Ascendente: este es un momento para definir un rumbo en la vida, y aunque las cosas estén cambiando o el camino esté lleno de dudas, tendrás que permitirte fluir en las posibilidades, o tener paz en no saber a dónde estás yendo. En la vida todo está conectado, así que no temas, que los momentos de duda también son necesarios.
Para Cáncer de Sol o Ascendente: esta luna nueva te permitirá conectar con la idea de lo supremo. Permítete cuestionar tus creencias y reformular tu fe, porque ahí es cuando realmente conectamos: desde lo más íntimo del alma.
Para Leo de Sol o Ascendente: este es un período para darle una fuerte lucha a las sombras que acechan desde el inconsciente. Atrévete y no tengas miedo a caerte en el proceso… sólo así sobrepasamos nuestros miedos y nos volvemos verdaderamente fuertes. Este proceso puede ser duro, pero también muy reconfortante. Apóyate en herramientas sanadoras y terapéuticas para recibir lo mejor de esta lunación.
Para Virgo de Sol o Ascendente: esto tiene que ver con abrirte a encontrarte con el otro, pero de una manera sentida y profunda. Es bueno preguntarte qué cosas se juegan con el otro que a veces se borra la línea con los demás. ¿Hasta dónde me permea el otro? ¿Qué es lo que realmente buscas en los demás?
Para Libra de Sol o Ascendente: este es un momento para ordenar un poco el caos de tu vida. Permítete el silencio que puede darte la respuesta. En temas laborales, este es un momento para descubrir qué es lo que querés dar y qué te llena espiritualmente.
Para Escorpio de Sol o Ascendente: este proceso tiene que ver con un nuevo proyecto, incluso artístico, venido desde el fondo de tu alma y que exprese todo ese sentido y rico mundo interior. De la más profunda oscuridad, sale la luz más radiante. Ábrete al amor y reenamorate de vos mismo.
Para Sagitario de Sol o Ascendente: si la marcha se detiene, quizás es momento de parar. Permítete escucharte en el silencio, y no desesperes porque no tengas la respuesta ahora. Si sientes angustia, abre las compuertas de tu alma y deja que ésta se exprese. Liberar todo puede ser muy reconfortante. Este será un período de renovación interior y a nivel de hogar, así que un nuevo período comienza para ti, pero para eso, permítete cerrar capítulos.
Para Capricornio de Sol o Ascendente: este es un nuevo comienzo en los temas comunicacionales, una nueva manera de expresarte o una renovación en la forma de ver las cosas. Este proceso tendrá que ver con aprendizajes, y para eso tienes que escuchar lo sutil. Comunícate con Dios, háblate, y aguarda las señales para que te confirmen por dónde has de moverte.
Para Acuario de Sol o Ascendente: este será un período para afirmarte en tu valor y tu autoestima. Descubre tus dones tan hermosos de conexión y cómo puedes invocar lo sutil si te lo permites. Busca y prioriza aquello que te hace tan bien al alma.
Para Piscis de Sol o Ascendente: es un nuevo comienzo en tu vida y has de tomarlo como una gran aventura. Entre más abierto estés al proceso, mejor fluirán las cosas, así que no desesperes y deja que todo se manifieste de acuerdo al plan divino. Estarás redefiniéndote, en esta conexión tan loca con el universo. Sos un canal, y en esto está tu gran misión de servicio.
